La rotoscopia es una de las técnicas de animación más utilizadas en la historia del cine tanto para animar como para realización de efectos especiales. Aquí os contamos en qué consiste y cómo se ha utilizado a lo largo de las décadas.
Si os hablamos de películas realizadas con rotoscopia, es posible que no sepáis de qué aparato o de qué puñetas estamos hablando. La rotoscopia es una técnica de animación bastante antigua y que todavía se sigue utilizando hoy en día y que consiste, principalmente, en dibujar encima de un fotograma para imitar el movimiento. O lo que es lo mismo y un poco a lo basto, "calcar" una película de acción real para transferir lo rodado a un medio animado.
Esta técnica se ha usado tanto para la realización de efectos especiales como para la animación de películas de dibujos animados. Originalmente se realizaba gracias a un rotoscopio, un aparato creado en 1914 por el animador Max Fischer que combinaba un proyector y una superficie de trabajo y que le permitía calcar los fotogramas de una película en acción real.
Este invento revolucionó el panorama de la animación del momento, ya que permitía estudiar y reproducir movimientos de manera realista y aumentó la calidad de las animaciones de su época.
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